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Con la llegada del buen tiempo es momento de lucir nuestra piel y también prepararla para los días con más sol; te enseñamos 4 mascarillas para probar
Las mascarillas faciales forman parte de una rutina facial completa y desde hace un tiempo su uso se ha exteriorizado y popularizado. Más allá de un evento puntual, ahora somos muchas las que las utilizamos más habitualmente. Porque al final las mascarillas enganchan, y más cuando las preparas en tu propia casa, con ingredientes del mercado.
El K-beuaty y el BOOM de las mascarillas faciales
La popularización de las mascarillas faciales se debe al boom del «K-beauty» o belleza Coreana, tal y como te explicamos en otro artículo. En Corea del Sur el cuidado de la piel es algo muy valorado y consagrado, tanto en hombres como en mujeres, forma parte de su ADN y de su cultura. Y con la expansión del K-Pop (estilo musical coreano) y la cultura coreana, también llegó la influencia de la cosmética. Su rutina facial consta de 10 pasos: desmaquillar los ojos, limpiar la cara, exfoliar la piel, tonificar, aplicar esencias faciales, ampollas, mascarillas, crema para los ojos, hidratar y, por último, colocarse una crema o mascarilla de noche. Y está la realizan de dos a tres veces al día.
Ahora ya sabes cuál es el secreto de la piel asiática: ADN y fuerza de voluntad y… ¡Mucha dedicación!
No hace falta tener una rutina de diez pasos para cuidar nuestra piel, pero sí que podemos “copiarles” ese amor por las mascarillas, y empezar a crearlas en nuestra propia casa de manera natural y además, económica.
5 mascarillas para todo tipo de pieles y momentos
Foto de GettyImages
Las mascarillas a diferencia de las cremas de cara, tienen un efecto más potente por la concentración de principios que tienen. Debemos aplicar una mascarilla u otra según la carencia que tengamos en nuestra piel: falta de hidratación, exceso de grasa, piel apagada, exfoliación…
Mascarilla hidratante
Pronto será temporada de fresas y con ellas te traemos esta mascarilla. Coje 4 o 5 fresas hasta crear una pasta y mezclalas con dos cucharadas de miel o sirope de ágave. Extiende la mezcla por tu cara y cuello y deja actuar durante 20 min y aclarar siempre con agua fría.
También esta mascarilla la puedes hacer con aguacate y plátano, una opción para cuando no sea temporada de fresas. Estos dos alimentos ricos en vitaminas y minerales, son además muy hidratantes. Es importante recordar que como estos dos alimentos son muy pegajosos y contundentes, mejor añadir una cucharada de miel o sirope de ágave.
Mascarilla para piel grasa
Para una piel grasa una mascarilla muy efectiva es coger tres cucharadas de yogurt natural, dos de avena y dos de ralladura de naranja. Mezcla los ingredientes, coloca la pasta en tu cara y cuello y deja esperar 15 min. Fuera brillos y exceso de grasa con ella.
Mascarilla 360 y perfecta para eliminar bolsas y ojeras
Esta mascarilla es para todo tipo de pieles, y aunque no tengas ojeras ni bolsas, es hidratante, antioxidante, refrescante y antiinflamatorias. Perfecta para las temporadas estivales donde tenemos la piel más dañada por el sol.
Cojemos el pepino, lo cortamos y lo batimos o licuamos, depende de lo que tengamos en nuestra casa. Luego, incorporamos el huevo y lo removemos hasta conseguir una mezcla homogénea. Esta mascarilla al ser más líquida mejor aplicarlo con una brocha y dejamos actuar entre 15 a 30 min, después lo retiramos con agua tibia. Si eres vegano/a y no quieres utilizar huevos puedes sustituir el huevo por sirope de ágave.
Mascarilla exfoliante
¡Más huevo! En esta necesitamos clara de huevo y servilletas de papel. Separa la clara de un huevo y aplícala a la cara con ayuda de un pincel. Después coloca los trozos de papel por todo el rostro a modo de mascarilla y aplicando más clara encima para que se queden pegados. Espera unos 10 minutos hasta que se seque y retira con mucho cuidado. Esta mezcla exfolia la piel y elimina los puntos negros y las impurezas.
Si eres vegano/a tenemos otra opción para ti. La mascarilla estará formada por dos cucharadas de sirope de ágave a las que añadiremos almendras machacadas o semillas de chía, lo que prefieras. Aplica la mezcla en la cara con movimientos suaves y, pasados 15 minutos, aclara con agua tibia.
Como ves son muchas las opciones que tenemos y todas ellas baratas y accesibles.
Es importante no utilizar ninguna mascarilla casera si tienes una piel sensible o con algún problema dermatológico como un brote de acné o la piel rosácea. Y también, antes de mezclar los ingredientes, asegúrate de que todos los utensilios y recipientes estén perfectamente limpios, para reducir las posibilidades de contaminación.